
Nunca cuentes demasiado de ti
Nunca cuentes demasiado de ti…Si fácilmente abres la boca y lo cuentas todo, la información que compartes se vuelve barata. Si hablas demasiado de las personas que aprecias, como tu familia, a ellos también los despojas de dignidad. Aprendamos a guardar nuestros asuntos y de esa manera proteger a los nuestros.